Escrito por: Francisco Segovia
New York, 29 de julio, Tribuna Abierta.
Lenta pero progresivamente el Gobierno de Biden está tratando de endurecer su postura ante la inmigración ilegal por la exigencia del pueblo norteamericano que se ve sobrepasado en número en los diferentes Estados por estas personas que nombre de pedir asilo político, vienen y vienen más bien por la parte económica. No son perseguidos políticos, sino son personas que quieren mejorar su situación económica y se arriesgan pagando a los coyotes y quebrantando la ley migratoria de los Estados Unidos, manifiesta. El agente de inmigración les advierte que el cruzar la frontera en forma ilegal, convertirse en indocumentado, trae como riesgos la reportación y castigos adicionales y una vez que una persona es deportada, ya no puede volver a los Estados Unidos.
